LUNA CUADRATURA SATURNO

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

- Castración emocional o Maestría Emocional      -

 

Hoy haremos un pequeño análisis de lo que puede representar una cuadratura Luna– Saturno, independientemente de los signos en cuales se encuentran estos dos astros. Esta configuración es bastante sólida y rígida, incluso puede ser castradora, así que puede ser interesante entenderla, sea para brindar un aporte y apoyo a las personas que tienen un aspecto natal similar o para guiar y aconsejar a personas susceptibles de tenerlo.

Nuestro querido Saturno ha estado considerado durante muchos años como el planeta más duro, más lento y re evaluativo de todos; fue llamado el Maléfico Mayor antiguamente como simbolismo de las pruebas a las que uno se tiene que enfrentar donde cae en nuestra carta.

Mientras que las reevaluaciones nacientes de Plutón engendran crisis terriblemente profundas y destructoras (aunque potencialmente muy beneficiosas), las de Saturno son más bien lentas, pesadas, y agotadoras; de allí nace el potencial de sabiduría que se puede extraer de un aprendizaje largo.

 

Que pasaría cuando, la Luna, madre de vida, cuidadora eterna de las noches, emocionalmente presente e intuitivamente expresiva; nuestra hermosa Diosa Luna, magnifica y cambiante, poderosa y frágil a la vez; que podría suceder cuando nuestra Luna entra en contacto con Saturno?

 

Es muy cierto que, en los desiertos y las altas montañas arridas, que pertenecen a los dominios de Saturno, encontrar agua puede ser algo complicado; por otra parte, el agua es uno de los elementos indispensable para nosotros sobrevivir, y nuestro propio cuerpo es compuesto de 65% a 75% de agua. En Astrología se puede determinar el porcentaje de agua según la repartición de los planetas en signos y, sin ninguna duda, las personas con un alto porcentaje de agua en sus cartas, tendrán proporcionalmente un mayor grado de sensibilidad, se verán más afectados por tal configuración.

 

Los nativos con algún contacto Luna Saturno suelen ser muy sensible, pero al mismo tiempo reprimiendo constantemente esta misma sensibilidad que no dejan aparentar. Seguramente en la infancia haya existido la presencia de una figura Capricorniana rígida ocupada en castrar la emoción (dominio de la Luna) o por lo menos impedir que el nativo exprese esta emoción, la deje salir. Existen varias categorías de emociones, pero en este contexto, las que van a tener un particular efecto sobre la vida del nativo serán las que tienen que ver con el MIEDO, la SORPRESA, y la TRISTEZA. Desde niños inocentes que todos fuimos algún día experimentamos el campo de las emociones, de manera más o menos intensa según nuestra predisposición psicofisiológica, y la aceptación y exteriorización de nuestras emociones, de lo que hemos sentido a un momento dado, es demasiado importante para lograr crecer de manera sana. Cuando no logramos hacerlo, estos “sentires” se quedan encarcelados en nuestro subconsciente y dictan en cada momento de nuestra vida nuestra conducta y manejan nuestro comportamiento. Saturno, metido allí en nuestro mundo emocional, da una perspectiva y una tendencia muy dada a experimentar el MIEDO, y ese mismo miedo uno lo adquiere a través de la educación y de las personas que nos rodean; por ejemplo si un padre dice a su hijo “no lleva tu juego al colegio porque los demás te lo van a dañar”, está sembrando semillas de miedo en tu interior, que harán que tu tendrás tendencia a anticipar la “amenaza” (entonces inexistente), procurándote sentir ansiedad, incertidumbre e inseguridad. Este mismo miedo es el que lleva también el nativo a castrar la emoción naciente de la SORPRESA ya que habría que tener todo bajo control para lograr “protegerse” de las supuestas amenazas, cualquieras que sean estas. El miedo tiende a crear pesimismo, pena y SOLEDAD, definiciones que pertenecen al territorio de la TRISTEZA. El melancólico Saturno, en su deseo de responder ante sus DEBERES y sus RESPONSABILIDADES, encierra el nativo en un mundo interno que suele ser bastante oscuro, escaso en alegría y diversión. Muy frecuentemente los nativos con esta configuración, suelen ser personas muy tristes por dentro ya que no se les han permitido expresar y sentir emoción desde su infancia. Existen varios tipos de personas Luna-Saturno; uno de ellos es el que creciendo se vuelve cada vez más rígido ya que desde la temprana edad se le ha estado impuesto de “tener que crecer antes de tiempo” (Sue Tompkins “los aspectos en astrología”) y este reproducirá la esquema mostrada hasta experimentar un día, por un tránsito o una progresión, una situación lo suficientemente problemática para llevar el nativo a reevaluarse. Cuanto mayor sea la persona Luna Saturno, mayor será la inseguridad y la barrera emocional. Otro tipo de personas Luna - Saturno experimentaran un sentido de inmadurez ya que habrán sido sobre-protegidas y al mismo tiempo discapacitadas a nivel socio-cultural; muy probablemente hayan tenido que vivir LIMITES SATURNINAS y no hayan podido desarrollar de manera adecuada los propios sentidos de RESPONSABILIDAD que se le otorga tradicionalmente a una persona cuando crece. La IMAGINACION de la Luna también suele ser reprimida por Saturno ya que para responder a las necesidades y ser una persona MADURA se suele creer que esta es totalmente innecesaria, por no decir PROHIBIDA. En aspectos tensos, el factor Tierra con el pragmatismo y el escepticismo que lleva suele oponerse al factor emocional. Otro factor Lunar que a menudo esta fuera de contexto en esta combinación es la SOCIABILIDAD ya que influenciados por el MIEDO los individuos Luna-Saturno “tienden a adoptar una actitud defensiva” y “sus respuestas pueden estar extremadamente controladas”. En los casos extremos que el nativo Luna Saturno sea muy sensible, se podría sentir tan vulnerable y asustado ante los aspectos emocionales de la vida que no se atravesaría a abrirse a los demás y “recibir el alimento emocional que tanto necesita”. Es muy frecuente encontrar a una persona Luna-Saturno con grandes problemas de timidez, como consecuencia del temor que existe a ser rechazo.

Lastimosamente, puede existir muchas más consecuencias resultantes de este aspecto Luna-Saturno, como el de ALIMENTACION REPRIMIDA (anorexia), o TEMOR AL PASADO, AUSENCIA EN EL HOGAR, MIEDO A LOS NIÑOS (que son todo lo que hay de mas flexible) y existirá muy seguramente un tipo de rechazo hacia sus emociones, que puede conducir más adelante a profundas depresiones, melancolías y/o problemas de salud.

 

Definitivamente el tipo Luna - Saturno tendrá algún trabajo que hacer en si-mismo para reconocer las limitaciones que le han sido impuestas por la vida y abrir las cajas del INCONSCIENTE para limpiar las que son llenas de tristeza, donde las emociones se refugiaron antiguamente cuando no se permitía liberarlas abiertamente. La sensibilidad está presente en estas configuraciones y aunque Saturno es resistente y persistente, en algún momento no podrá impedir el poder y la luz de la Luna hacerse notorios en la personalidad del individuo. La Luna hace mover los mares y rige las mareas de nuestro subconsciente y cuando el destino lo planteara oportuno la reevaluación emocional que tendrá que vivir el nativo será inminente. Los grandes poderes que esta reevaluación, si se lleva a cabo un trabajo profundo y pertinente, podrá despertar son numerosos; una PACIENCIA digna de la de un árbol, preciosa en la escucha de los demás, con los cuales el nativo se sentiría en total armonía sintiéndose ACEPTADO y siendo consciente de que el rechazo no existe sino en la mente; una MADUREZ y EXPERIENCIA haciéndole entender el proceso por cual ha pasado y permitiendo la entrada del flujo magnifico de la SABIDURIA y del ENTENDIMIENTO; el nativo que habrá hecho de su combinación Luna-Saturno una fuerza, sabrá que el temor no es más que una ilusión y que dándole existencia y razón de ser, uno atrae lo que teme. El individuo Luna Saturno se volverá muy afectuoso porque sabe lo necesario que es recibir afecto tanto como lo doloroso que es no haberlo recibido. La flexibilidad que podrá desarrollar le permitirá ser una figura PUBLICA sin ningún esfuerzo ni preocupación, siendo algo natural.

 

No podríamos hablar de Madre o Padre sin poner las casas en el contexto de una carta específica, mas sin embargo cuando la Luna y Saturno están combinados equilibradamente, podemos asistir al aspecto de los “Padres ideales”, involucrando una equilibrada dosis de sensibilidad y disciplina, vida interior y vida pública, interés por el hogar y por la carrera, y una visión integral de la necesidad de paz e interiorización junta al cumplimiento de los deberes y responsabilidades.

 

Bajo la dimensión de un potencial explorado y un aprendizaje trascendido el nativo Luna-Saturno habrá desarrollado un poder femenino. El poder de sentir sus emociones en cada parte de su cuerpo, el poder de sentirlas vibrar en su cuerpo y de disfrutarlas en cada instante, porque él se dio cuenta de que sentir las emociones, no importe cuales sean estas, es lo que lo hace sentir en vida. El aprendizaje resulta en que la magia de la vida está en el corazón, en el percibir lo que los detalles los más insignificantes nos pueden hacer sentir alegres y felices, y, seamos hombre o mujer, existe una feminidad intuitiva queriendo expresarse en cada uno de nosotros.

 

Un buen ejemplo de un personaje que ha podido usar su cuadratura Luna-Saturno de manera beneficiosa es Charles Chaplin. Tuvo problemas afectivos en la infancia, pasó por dificultades con los padres y privaciones de toda índole, ausencia de ambos padres, carencias afectivas, extremada pobreza y pasar necesidades incluso hambre. Tras muchísimos esfuerzos y voluntad de sacar adelante su familia, logra a sus 28 años ser uno de los actores cómicos más reconocidos.

 

Autor: Baptiste Le Bras